jueves, 29 de septiembre de 2011

Vacaciones en Septiembre


Este año, por cosas del destino, he realizado las vacaciones en Septiembre. Y la verdad es que me ha gustado mucho. He estado por sitios de costa (Costa Brava más concretamente) y ha sido muy beneficioso.

Lo más importante es que el tiempo ha estado muy correcto: sol y calor, que eran importantes para el destino elegido. Ya sabemos que los septiembres a veces son complicados, con lluvias torrenciales y demás. En mi caso no ha sido así y he podido disfrutar del veranillo de San Miguel plácidamente.

El número de turistas que te encuentras en Septiembre es muy muy muy inferior al que te puedes encontrar en Julio y Agosto, meses éstos en los que no puedes caminar por las calles Mayor por estar atiborradas, sufres colas para entrar en los restaurantes, es difícil encontrar una buena colocación en la playa, etc.

Pero no todo iba  a ser bueno, siempre puedes sacarle punta a algún tema. La parte negativa ha sido el cierre fulminante al acabar Agosto de algunos restaurantes, bares y, lo más significativo para mi, puntos de información turística. Eso fue lo que me pasó en varios lugares pero el más destacado es sin duda el pueblo de Peratallada. Para los que no los conozcáis es uno de los pueblos medievales mejor conservados de Catalunya y está declarado Conjunto Histórico-Artístico. Es un pueblo que principalmente vive del turismo. Pues bien, su oficina de información, como podéis observar en la foto adjunta, estaba cerrada por “Fin de temporada”. Eso sí, los parkings de pago para los visitantes seguían cobrando.




miércoles, 14 de septiembre de 2011

Momentos playeros


Qué bien cuando llega el verano y podemos disfrutar de la playa. Todo un largo invierno esperando el momento de remojarnos un rato para apaciguar el duro calor de los meses de verano.

Cuando llegas a la playa localizas el lugar donde ponerte pensando en que ese es el mejor de los que queda. Y estas contento con el sitio hasta que empieza a venir la gente “tardía” queriendo ponerse en el sitio que había libre hace 2 horas pero en el que ahora queda ese escaso par de metros hasta el vecino. Tú empiezas a pensar: “pero muchacho, ¿no ves que no cabes ahí?”. Siempre piensas que se dará cuenta y que no se embutirá ahí pero no se da cuenta y lo hace. Así que sólo te queda el remedio de estirarte al máximo para intentar que su toalla no llegue a tocarse con la tuya.

Ese es un posible ataque. Otro es el del que planta la sombrilla tan cerca que incluso cuando el sol está arriba del todo su sombra te tapa. Y eso no es lo peor; lo peor es cuando ves que él se pone al sol y no utiliza la sombrilla en absoluto.

Las sombrillas también se pueden convertir en un elemento peligroso. Qué mala es la combinación de sombrilla mal plantada y un poco de viento. Esa sombrilla que vuela y que cualquier día se clavará en la espalda de algún despistado que toma el sol. El colmo de este suceso es que se vuele tu sombrilla cuando estés en el agua y necesites un buen rato para salir ya que con los nervios no eres capaz de acompasar respiración y brazadas para nadar y piensas: “para qué coño hice los cursillos de natación”.

Otra cosa que mola es la sombrilla – antena parabólica. Me refiero a esa sombrilla que se da la vuelta cuando sopla un poco de aire. Es ridículo.

jueves, 8 de septiembre de 2011

Mosquitos, lo peor del verano


La otra mañana había un mosquito en la inmaculada pared blanca de mi habitación. Ya habría hecho toda su faena pero pensé en matarlo igualmente para que a la noche siguiente no siguiera maltratándome (que fuera otro si acaso, que en la variedad está el gusto).

La cuestión es que fíjate como estaba de lleno (de mi sangre, era un mosquito sangre de mi sangre) que al intentar matarlo con la clásica palmada a unos 2 centímetros de la pared por si salía volando el tío va y ni se mueve. En el segundo intento de palmada he tenido que pegar literalmente los cantos de las manos a la pared para matarlo. Lo conseguí y me quedaron las manos llenitas de sangre, de mi propia sangre.

La diferencia de velocidad del mosquito cargado al mosquito descargado es tremenda. A final de la tarde, cuando aparecen, es imposible matarlos con las manos de rápidos que son. Sin embargo por la mañana no son capaces ni de moverse, como el ejemplo que ya he comentado.

Recuerdo cuando compré el piso que fui a preguntarle al presidente si podía instalar mosquiteras por fuera de las ventanas y persianas. Me dijo que sí podía pero que en esa finca (a pesar de tener piscina) no era necesario, que no había demasiados. En fin que me fié y pensé: “Bueno, si este verano hay mosquitos las puedo instalar otro verano”. La cuestión es que en el mes de Marzo ya tuve mosquitos y desde entonces todavía flipo con la respuesta del vecino. Así que, efectivamente, he constatado que hay mosquitos: he pasado el verano lleno de picadas.

Lo terrible es que no hay herramienta útil contra ellos a pesar de que estamos en el 2011. Por las noches duermo con un aparato Fogo eléctrico para que no me piquen, pero ni así. Ha habido mañanas en las que lo he podido constatar: con el aparato incluso me han picado y se han quedado en la habitación bien vivitos y coleando.

viernes, 2 de septiembre de 2011

Ejemplo de servicio telefónico


Esta es la historia de la llamada que realicé al teléfono de los cines Atrium de Sant Andreu de la Barca para saber, simplemente, cuándo es el día del espectador. Ya sé que eso en Internet sale, pero en Internet hay tanta información que mucha de ella no está bien. En este caso encontré webs que me decían el martes y otras el miércoles. Así que para salir de duda llamé al cine.

Inicialmente aparece el contestador automático típico con 3 opciones posibles: (a) horarios y programación, (b) reservas telefónicas y (c) ayuda a reservas por internet. Escojo la (a) pensando que quizá lo digan pero no tengo tanta suerte; me recitan el típico chorrón de películas y horarios y cuando acaba me dice que si quiero elegir otra extensión puedo hacerlo en ese momento, que pulse (1) para hablar con el operador o que para terminar la comunicación sólo tengo que colgar (gracias por aclararme este concepto del colgar). Pulso (1) para que me pasen con el operador y entonces, oh señor, me dan el chorrón de películas de la semana del 13 al 19 de febrero del 2009. Si si, os lo juro. ¿Qué como sé que se referían al 2009? Porque tenían programada la película de El extraño caso de Benjamin Button, que se estrenó ese año.

Y es que esto de los servicios telefónicos da mucho juego, tanto que a veces resulta exasperante para el que llama: opciones que no cuadran con tu consulta, minutos y minutos de navegar por el contestador sin conseguir hablar con una persona humana, minutos de esperas, el trabajo previo de conseguir el número similar pero que no sea 92 para que no te cobren la llamada, etc.

Espero que la empresa de los cines Atrium no esté pagando un pastón a una consultora que le mida la calidad del servicio telefónico que ofrecen porque (a) es muy fácil de saber en este caso, (b) me lo podrían dar a mí y se lo hago yo y (c) no se me ocurren más razones pero ya que estamos con opciones quería hacer la gracia.