miércoles, 8 de febrero de 2012

El infierno de Contador


El infierno que Alberto Contador está sufriendo ha soltado su última llamarada: sanción de 2 años a contar desde el día del supuesto positivo (a partir de ahora día D). 500 y pico días después del hecho le sancionan a 730 días sin poder disputar pruebas. Todos los esfuerzos realizados el año pasado a la mierda. Le despojan de todas sus victorias desde el día D, incluso de aquellas en las que no dio positivo.

Desde que comenzó sus andaduras por el Tour en el 2005 hasta este año se han disputado 8 ediciones (contando la del 2012 que está por celebrarse). Pues bien, éste es su historial tras la sanción:
  • 5 disputados 
    • 3 disputados con resultado final (2005-31º, 2007-1º, 2009-1º)
    • 2 disputados pero descalificado (2010 y 2011)
  • 3 que no le dejaron  disputar (2006 por la Operación Puerto donde no estuvo implicado, 2008 por la sanción al equipo Astaná que había sufrido dos casos de doping antes de que él llegara y 2012 por su propia sanción)
Es increíble: de ocho Tours sólo va a poder competir en tres. Además, recordemos que el del 2009 lo ganó a pesar de Lance Armstrong y Johan Bruyneel, que hicieron todo lo posible aun estando en el mismo equipo porque no lo ganara. Menuda carrera llana de obstáculos.

Una de las grandes preguntas que ha envuelto a Alberto estos días era si iba a abandonar el ciclismo en base a unas declaraciones suyas en las que comentó que lo meditaría seriamente si finalmente le sancionaban. Ayer en la rueda de prensa dejó claro que no pero, desde mi punto de vista, no se si es la decisión acertada. Digamos que yo no veo claro que vaya a demostrar ya nada. Para mi ya es un gran campeón, limpio, capaz de ganar en febrero, mayo y julio o septiembre. No necesito saber que seguirá ganando, porque ya lo sé. Retirándose dejaría ciertamente huérfano el ciclismo de un gran campeón, el último gran campeón que ha dado espectáculo real.

Si quiere seguir corriendo he leído por ahí un consejo de que corra para destrozar las pruebas. No sería mala idea. Tiene la capacidad de destrozar el pelotón en cualquier puerto, de eliminar las tácticas de equipo que los directores hayan podido pensar. Correr para joder las pruebas y el poder establecido que tanto daño está haciendo a los ciclistas.

Y lo que hace falta de verdad es un poquito de unión entre los ciclistas. Es lamentable todo lo que tragan. El único deporte y colectivo donde tienes que demostrar tu inocencia, el único deporte y colectivo al que sancionan sin demostrar la culpabilidad, con años de controles matutinos y controles sorpresas (ahora se hacen en más deportes, pero desde hace mucho menos tiempo). Se me ocurre una buena acción: que nadie corra (o si me apuráis los 30 primeros de la clasificación UCI) hasta que Alberto no pueda correr. Ya me dirán qué es un Tour sin Cadel Evans, hermanos Schleck, Ivan Basso, Vicenzo Nibali, Joaquim Rodríguez, Bradley Wiggins y unos pocos más. Que corran el resto si les da la gana. No creo que sea una medida tan descabellada: los buenos encontrarán equipo seguro en caso de tener algún problema y además con sus millonarios contratos pueden mantener unos meses a los menos buenos y así todos dejarían de correr.

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